Le Traict de Pen-Bé

Sea cual sea la época del año: la costa desde Pont Mahé hasta Pen Bé sigue siendo salvaje, misteriosa y poderosa. Caminando por el arrecife, el excursionista se convierte en uno con la naturaleza que le rodea. Frente al rocío del mar y con los sentidos alerta, quedarán impactados por los mil aromas que mezclan el páramo y el mar. Se quedará atónito con los gritos de los pájaros que mezclan sus cantos con los del océano. Se sorprenderá, al final de la bahía, de reconocer a sus semejantes, reunidos en este pequeño trozo de tierra, esta península barrida por el viento y las olas, donde todo el año se ocupan los agricultores del mar. La fuerza del litoral deja paso a la calma de las marismas, donde las garzas buscan su alimento hasta el final del invierno, y a la calma del bocage, donde las vacas pastan tranquilamente bajo los robles centenarios de este auténtico campo. ¿Has probado esta ruta? ¡Danos tu opinión!