Château de Martigné

Para describir el castillo de Martigné, ninguna descripción es más encantadora que la realizada por Didier Auvray y Alain Betin en "Châteaux et manoirs de la Sarthe, Editions" (Cénomane, Le Mans, 1988). "Hay casas que se integran tan bien en el paisaje que parecen haber formado siempre parte de él (...) En este apacible entorno se encuentra el castillo, cuyo plano parece muy complejo a primera vista. Hay dos edificios paralelos con sus altos frontones: el primero se construyó en el siglo XV y el segundo se añadió un siglo después. Aquí y allá se pueden ver las huellas de su antigüedad, arcos y aspilleras, piedras deterioradas o rampas talladas. El color oscuro de las cadenas de ángulos rojizos destaca sobre el yeso claro de las paredes. Estos edificios gemelos estaban enmarcados por pabellones cuadrados en cada extremo para lograr la simetría. El castillo, situado en un parque centenario, vive en su antigua autosuficiencia con un huerto y huertas.