LA MALÈNE

Situado en el corazón de las Gargantas del Tarn, el pueblo de La Malène vivió tiempos difíciles durante la Revolución Francesa. Las rocas aún conservan las cicatrices de los incendios que asolaron el pueblo. Los principales lugares y monumentos del pueblo son: el Manoir de la Malène, del siglo XV (Luis XII ordenó arrasar las fortalezas rebeldes, pero gracias a los servicios de un señor de Gévaudan, el castillo se salvó. Desde entonces se ha convertido en un hotel restaurante). También está la iglesia románica de Saint-Jean-Baptiste, del siglo XII, declarada Monumento Histórico desde 1928, y las ruinas del Castel Merlet, el castillo más antiguo conocido de Francia. La Malène es conocida sobre todo por sus barqueros, que muestran a los visitantes las magníficas gargantas del río Tarn. El pueblo es también punto de partida y llegada de excursiones en canoa y kayak. Al pie de dos grandes mesetas calcáreas, el pueblo atrae a visitantes que disfrutan de una amplia gama de actividades al aire libre.